Este año, la educación técnica en Nicaragua sigue creciendo y adaptándose a las necesidades del país, preparando a los protagonistas para un futuro lleno de oportunidades y desarrollo, para muestra la historia de Argenis Lorenzo Martínez López originario de la comunidad caribeña: Kukra Hill.

Es un joven destacado en la educación técnica, en el Centro Tecnológico de Bluefields, quien estudia en modalidad de internado la carrera de Energía Renovable, su discapacidad se ha vuelto un motor para sobresalir en la vida.

Perdió sus piernas a consecuencia de un accidente en el hogar, cuando apenas tenía un añito de vida, “no tener mis piernas no ha sido un impedimento para prepararme, juego fútbol, he ganado trofeos en categoría juvenil e infantil”.

Al hablar de su desarrollo humano cuenta que, en cada proceso de su vida, “me encuentro amigos que siempre están a mi lado para apoyarme. Doy gracias a mis docentes, por su acompañamiento y buen trato, siempre me están motivando a ser mejor, estudiar para alcanzar mis metas”.

“Cada día me levanto a las 5 de la mañana, lavo mi ropa, los chavalos me ayudan en tenderla, soy capaz de hacer por mí mismo todas mis tareas cotidianas, en mi casa incluso, le ayudo a mi mamá a jalar agua, estudié la primaria y secundaria en un desarrollo normal, gracias a esas buenas políticas de inclusión que brinda el gobierno”, continúa relatando Argenis.

“Siempre he dicho que yo soy normal, mis padres están contentos que haya tomado la decisión de estudiar una carrera técnica, su lema siempre ha sido prepárate porque el estudio es la clave del éxito”.

Para Argenis el físico es lo de menos, “lo más importante es lo que llevamos por dentro”, entre bromas y risa cuenta que ya perdió la cuenta de cuantas novias ha tenido, “además, canto, escribo la letra de mis canciones, cuando pongo la pista mi mente vuela y se inspira, mi autoestima es grande, nadie me la puede quitar”.

La proyección actual es concluir su carrera técnica, y desde ya se visualiza nuevas metas, “como estudiar arquitectura”.

Se divierte jugando Free Fire, cantando y bailando, con sus compañeros de estudios técnicos. “Este Centro Técnico es un gran apoyo, todo es gratuito, buena alimentación, te brindan estabilidad, siempre pendiente de nuestro cuido y seguridad, con una amplia oferta de carreras técnicas, profesionalizando a la juventud para el trabajo”. 

En su mensaje a sus compañeros, les alienta a “echarle ganas a la vida, sobresalir, que, así como hablan de mi personalidad, que soy un chavalo positivo, que se esfuercen para que así hablen de ellos porque el querer es poder”.

Carelia González Campbell, compañera de estudios y amiga de Argenis comenta que cuando se conocieron “él fue el primero que me habló, para mí es un buen amigo y no solamente eso sino como un hermano, siempre está para nosotros, así como nosotros estamos para él”.

Otro de sus compañeros de estudios es Adonay Bayter, con quien tiene lazos estrechos de amistad y regularmente es quien lo carga para facilitarle hacer algunas actividades. 

“No me molesta cargarlo, lo hago con mucho gusto, lo apoyo en lo que yo puedo, tengo aproximadamente 1 año y medio interactuando con él, es un chavalo bien respetuoso, se desempeña muy bien en el estudio y le gusta cantar”. 

Los docentes técnicos tienen presente la inclusión en la formación tecnológica de todos y todas, es el caso de Mario Rugama, docente de la especialidad de Energía Renovable, quien afirma que se identifica mucho con Argeny “porque es un joven carismático, divertido, recuerdo que el año pasado lo visitamos en su casa de habitación donde platicamos con su mamá buscando la forma de cómo poderlo apoyar para traerlo a estudiar al Centro Tecnológico”.

Argenis es un claro ejemplo de como la educación técnica ha evolucionado en 17 años de Gobierno Sandinista, permitiendo a jóvenes, mujeres, hombres, adultos, personas con discapacidad, acceder a carreras y cursos para salir adelante.