Siuna | Maryorie Duarte | 07.07.2025 | 15:09
En un ambiente de paz y tranquilidad, Nicaragua celebra la vida y el legado de sus héroes revolucionarios, especialmente en los centros técnicos que llevan sus nombres. Un ejemplo claro es el Centro Tecnológico Bernardino Díaz Ochoa en Siuna, Costa Caribe Norte, que recientemente fue escenario de un emotivo conversatorio sobre la vida y obra de este insigne líder campesino.
El conversatorio estuvo a cargo de Dagoberto Sevilla, director del centro, quien resaltó la trascendencia del trabajo revolucionario de Bernardino. “Bernardino fue un sindicalista que, junto con Benigna Mendiola, su compañera de vida y lucha, fundó sindicatos rurales en el norte del país desde 1963 hasta 1971”, explicó Sevilla. “Este día fue elegido por la Asamblea Nacional en su honor y memoria.” También recordó que Bernardino y Benigna procrearon a Lenín Díaz Mendiola, Héroe campesino y Héroe de la Paz, asesinado tras el fallido intento de golpe de estado en Matagalpa.
Con una matrícula actual de más de 12 mil estudiantes en carreras técnicas y cursos de capacitación, este centro forma parte de las estrategias del Buen Gobierno para garantizar educación gratuita, digna y de calidad, especialmente en el sector agropecuario.
Bernardino Díaz Ochoa fue un campesino, sindicalista y revolucionario nicaragüense, considerado un símbolo de la lucha por la justicia y la libertad del campesinado. Es el autor de la célebre frase que resuena con una profunda sabiduría campesina: “No somos peces para vivir del mar, no somos aves para vivir del aire, somos hombres para vivir de la tierra”. Una expresión que sintetiza la sabiduría del pueblo campesino y su profunda conexión con la Madre Tierra. Díaz Ochoa fue brutalmente asesinado por la Guardia Nacional somocista el 3 de septiembre de 1971, tras ser torturado.
Las voces de los servidores públicos también se unieron a este homenaje. Yondra López, maestra, compartió su admiración: “Era un campesino sindicalista que se dedicó a organizar sindicatos y trabajaba la tierra. En honor a él se le puso el nombre al centro, y ahora, gracias a él, gozamos de educación técnica gratuita y de calidad”.
Por su parte, Reynaldo Lira Canales, maestro de agropecuaria, añadió: “Bernardino fue un agricultor productor sandinista que luchaba por los derechos y deberes del campesino. Es por hoy que nosotros en el campo lo recordamos con mucho cariño y respeto, siguiendo su legado, produciendo la tierra y enseñándoles a los estudiantes de carreras técnicas agropecuarias cómo hacerlo”.
La conmemoración de héroes como Bernardino Díaz Ochoa, a través de actos cívicos, desfiles y actividades culturales, tiene como objetivo mantener viva la memoria histórica y promover los ideales de la Revolución Sandinista, como la educación, la salud y la participación ciudadana.