Managua | Gabriela Almanza | 07.11.2025 | 11:56
Con el lema: “Carlos Fonseca: semilla eterna de dignidad, identidad y revolución”, el Sistema Educativo Nacional celebró el Primer Congreso Nacional de Historia e Identidad de Nuestros Pueblos, reuniendo a más de 800 participantes presenciales —entre estudiantes, maestros, historiadores y autoridades educativas— en el auditorio Carlos Martínez Rivas de la UNAN-Managua, y conectando virtualmente a más de 18,000 protagonistas del Sistema Educativo del país.
El evento fue inaugurado por el compañero Edgar Salazar Francis, representante del Subsistema Educativo Autonómico Regional y miembro de la Comisión de Interculturalidad, quien dio la bienvenida destacando que este congreso representa “un espacio de reflexión, de diálogo de saberes y de reafirmación de nuestra identidad cultural e histórica”.
Subrayó la importancia de contar la historia desde las vivencias de los pueblos, “reconociendo a figuras como el cacique Diriangén, el General Sandino y el Comandante Carlos Fonseca como pilares de la lucha por la soberanía y la paz”.
Seguidamente, la compañera Loyda Barrera, Directora General del Instituto Nacional Técnico y Tecnológico (INATEC), presentó los avances alcanzados en el marco del Eje 5 de la Estrategia Nacional de Educación “Bendiciones y Victorias 2024–2026”.
Detalló que: “se ha incorporado la asignatura de Historia e Identidad Nacional en las 75 carreras técnicas y en las universidades para estudiantes de primer ingreso, con la meta de que en 2026 todas las carreras universitarias la incluyan”. Además, añadió que, “se han actualizado los contenidos curriculares en primaria y secundaria, y más de 65 mil maestros y servidores públicos participaron en seminarios y producción de materiales educativos”.
El panel central estuvo conformado por Thelma López, directora del Área de Ciencias Sociales y Jurídicas de la UNAN-Managua; Wilmor López, asesor presidencial en temas de cultura; Rafael Casanova y Luis Lobato, historiadores nicaragüenses quienes coincidieron en que: la educación es el motor de transformación social y que la historia debe ser contada desde los territorios, con un enfoque crítico y emancipador.
Entre los asistentes, Reina Acevedo, directora del Centro Tecnológico Ernst Thälmann de Jinotepe, compartió su experiencia desde las comunidades de aprendizaje. Destacó cómo estas han fortalecido el conocimiento histórico mediante diplomados, foros y actividades interactivas, promoviendo la apropiación de la historia desde las raíces ancestrales hasta la actualidad. “Estamos ratificando nuestro compromiso de seguir cultivando el conocimiento histórico como base de nuestra identidad nacional”, afirmó.
Este Congreso reafirmó la historia viva como herramienta de transformación social, orgullo patrio y defensa de la soberanía. Una jornada que honra el legado de nuestros héroes y heroínas, y fortalece la conciencia histórica como fuerza inquebrantable en la lucha por una Nicaragua libre, soberana y en paz.