La técnica ancestral de curtir alimentos, como el encurtido, ha cobrado nueva vida gracias a la pasión y dedicación de Doña Margarita Velásquez, protagonista de una historia que va más allá de la cocina para convertirse en un símbolo de aprendizaje y superación.

En la Escuela de la Comunidad El Hular, ubicada en el municipio La Dalia, Matagalpa, se realizó la entrega de certificados a egresados ​​del Programa Luz y Verdad de Matagalpa. Este programa, respaldado por el Gobierno de Nicaragua a través del INATEC, MINED y MEFCCA, tiene como objetivo principal el empoderamiento de emprendedores y la estimulación del desarrollo económico regional.

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Margarita Velásquez de 78 años, expresó su gratitud: “Muchas gracias a Dios y al gobierno, quienes me brindaron la oportunidad de estudiar y aprender a hacer chileros, encurtidos, y, sobre todo, a leer y escribir. Invito a todas las mujeres a buscar oportunidades de aprendizaje, debemos hacer algo. Ahora puedo firmar mi nombre y leer”.

En un contexto parecido, Nelson Palacios, de las Cuatro Esquinas, compartió su experiencia: “Agradezco a Dios por darme la fuerza para seguir aprendiendo. Nunca antes había estudiado. Debemos continuar aprendiendo; valoro esta oportunidad única que nunca imaginé tener”.

Everth González, director del Centro Tecnológico Monseñor Benedicto Herrera, de Matagalpa, destacó el papel fundamental de las familias en el proyecto Luz y Verdad: “Agradezco a las familias que lideran este proyecto, donde los protagonistas adquirieron habilidades prácticas en panadería, chileros, gastronomía, agricultura, y más. Celebramos con el apoyo de los docentes de la comunidad”.

Asimismo, Rafael Hernández, Secretario Político, resaltó la contribución del Gobierno en la realización de estos proyectos que llegan a todos los rincones del país.

En este evento, doce promocionados fueron protagonistas de un curso dedicado a la Elaboración de Encurtidos y Chileros. En él, se proporcionó formación en técnicas de corte, cocción de vegetales y métodos de conservación, complementado con una cartilla de alfabetización, brindando a los participantes, habilidades para aprovechar las frutas y verduras locales, agregando valor a las cosechas de la región.

La capacitación no se limitó a la teoría, sino que se incluyó la práctica de los conocimientos. Los emprendedores aprendieron a elaborar chileros utilizando productos locales como chiles, zanahorias, cebollas, entre otros. Esta habilidad les proporciona nuevas oportunidades comerciales para el desarrollo económico familiar.

Además, Doña Margarita compartió los pasos para la elaboración de chileros, detallando los ingredientes y el procedimiento paso a paso, destacando la importancia de la higiene y el cuidado en su preparación para mantener la calidad del producto final.